GRAPPLING POLICIAL

El grappling policial es una modalidad de combate cuerpo a cuerpo que se enfoca en técnicas de control, sumisión y neutralización de oponentes de manera segura y efectiva. Está diseñado específicamente para ser utilizado por fuerzas de seguridad y personal de aplicación de la ley, con el objetivo de controlar a sujetos agresivos o no cooperativos con el mínimo daño posible y de una manera legalmente justificable.

Características del Grappling Policial

  1. Control y Sumisión:

    • Enfatiza técnicas para controlar y someter a un oponente sin causar lesiones graves. Incluye luxaciones articulares, inmovilizaciones y técnicas de presión en puntos específicos del cuerpo.
  2. Reducción del Uso de Fuerza:

    • El objetivo principal es neutralizar amenazas de manera segura, reduciendo la necesidad de usar fuerza letal o excesiva.
  3. Adaptabilidad:

    • Las técnicas son diseñadas para ser efectivas en una variedad de situaciones, incluyendo enfrentamientos en espacios reducidos o con múltiples atacantes.
  4. Integración con Otras Técnicas:

    • Se integra con otras técnicas de defensa personal y procedimientos policiales, como el uso de esposas, armas no letales (porras, tasers) y tácticas de detención.
  5. Énfasis en la Seguridad:

    • Prioriza la seguridad del oficial y del sujeto, minimizando el riesgo de lesiones graves o mortales.